“Le pedí al Universo, a Dios, que no me permitiera odiar; porque para odiar necesito mucha energía, y yo prefiero usar esa energía para sanar mi cuerpo, sanar mi espíritu”.
“Le pedí al Universo, a Dios, que no me permitiera odiar; porque para odiar necesito mucha energía, y yo prefiero usar esa energía para sanar mi cuerpo, sanar mi espíritu”.